Para que un político se mantenga en la picota y genere recordación es necesario que mantenga cierta exposición pública, vía sus redes sociales, artículos publicados, apoyo social, entre muchas otras labores que debe hacer, por supuesto que tiene que tener cierta ascendencia partidaria de lo contrario estará condenado a desaparecer, al margen de encontrar oportunidades para hacerse notar.
No podemos negar que la receta la aprendió bien Kenji Fujimori, el encontró una oportunidad en el tema de la Investigación al Sodalicio de Vida Cristiana, ese mismo que encabezó durante años ese sujeto de apellido Figari, que abusó de jóvenes y que ahora vive muy tranquilo en Roma, amparado por la Iglesia.
Kenji apoyo desde el inició la conformación de una comisión investigadora, y la falta de apoyo de sus partidarios, encontró una oportunidad para fustigar al partido y hacerse notar, a continuación como era evidente publicó un editorial en un diario de circulación nacional, repitiendo la dosis de castigo, sin contar que es muy activo en las redes sociales, esto le ha hecho ganar indudablemente más espació en el partido, es que el menor de los Fujimori aprendió cuando ser agresivo y cuando pasivo.
A diferencia de Keiko, a quien luego de las elecciones no se le volvió a ver activa más haya de unos cuentos mensajes en FB, y una reunión con el presidente, ella no se ha caracterizado precisamente por tener expsosición pública dar entrevistas u emitir opinión alguna, sobre temas tan importantes como los que vive el país ahora, no se le escuchó declaración sobre los desastres naturales, la economía, seguridad ciudadana, etc.
Es que más activos se les ve a sus congresistas que a ella, dando la sensación que se estuviera escondiendo, que teme declarar sobre temas que ella considera incómodos.
Me parece que si Kenji sigue por ese camino con miras a su futuro político, ese tweet profético que lanzó durante las elecciones que el podría ser el llamado a ser el próximo candidato de Fuerza Popular, se podría cumplir.
Hasta Mañana
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