Esta claro que hay una facción del Fujimorismo que tiene claro que Kenji ha encontrado un espacio dentro del Fujimorismo, y esto indudablemente ha sido sentido en las bases de los que se podría llamar la facción de Keiko, donde sienten que el menor de los hermanos está escribiendo su propia agenda.
El someter al menor de los Fujimori a un proceso disciplinario, que en cualquier partido politico sería lo natural acá no es lo mismo, debido que el concentra un caudal electoral bastante importante, sin contar que es el que representa los intereses del padre.
De otro lado Keiko desde que perdió las elecciones se ha escondido tras el muro de la bancada fujimorista, y sus principales voceros, no ha sido capaz de articular una sola entrevista, solo se ha limitado ha emitir pronunciamientos a través de sus redes sociales.
Lo cierto es que la imagen de ser un partido sólido y disciplinado, va quedando atrás, si ha esto le sumamos que muchos de los congresistas, de la propia bancada pidieron la revisión de la ley anti transfuga que ellos mismos propusieron, me pregunto que pasaría si el tribunal constitucional se pronunciara en contra de la ley, acaso la bancada sería tan sólida como es hora.
Kenji se siente tan seguro, que no le pasará nada que el no renunciará al partido, es evidente que el tiene un sentimiento de pertenencia bastante alto, y tiene claro que la amonestación o la advertencia que se haga será para la tribuna.
Esta claro que las acciones de Kenji colocaron contra las cuerdas a Keiko, el colocarse en posición conciliadora versus la posición discrepante de la bancada que encabeza su hermana sus gestos como el saludar a Zavala, cuestionar las interpelaciones, dan como resultado evidente una posición diferente.
Esperemos recién es el segundo día del conclave veamos que pasa.
Hasta Mañana
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